LA PENA MÁXIMA " EL PENALTI ".

PENA MÁXIMA.

La manifestación más impactante del Reglamento es el penalti, catalogado como el máximo castigo del fútbol. Tan cruenta denominación, contrasta con la inocencia de su ritual: el verdugo va a cara descubierta, viste camiseta y calzón corto, su arma ejecutora es una bota, y su munición una pelota. El hipotético reo tiene la posibilidad de redimirse de la pena con un ágil movimiento de sus manos enguantados. El lance puede acabar, como mal mayor, en gol. Pura inocencia lúdica.

Idéntica ingenuidad en vuelve el duelo personal que, entra al guardameta -cuya perspectiva de la portería es grande- con el ejecutor, al que, contrariamente, el arco se le ofrece minúsculo y el rival enorme. Separados por 11 metros, quien más certero sea, ganará.

ANÉCDOTAS DE PENALTIS.

Larga historia. Año 1981. Cuartos de final de la Copa inglesa. El Stoke City está ganando al Notts Coutry (1-0). A pocos minutos del final, uno de sus jugadores para el balón con la mano casi en la línea de gol. Falta. Los once jugadores del Notts se colocan bajo la portería, el balón tropieza en la barrera y el Stoke pierde. Ante la injusticia del lance, el 2 de junio de ese año, la International Board, regula el penaltí, que entra en vigor en la temporada 1891-1892. Su novedad consiste en la ausencia de jugadores entre quien chuta, desde los 11 metros, y el portero. Al principio, éste podía adelantarse hasta los 5,50 metros, pero en 1929 se le obliga a permanecer en la línea de meta. En 1893 el portero del Aston Villa, que gana 1-0, la lanza la pelota al graderío en el minuto 90, justo cuando el árbitro ha pitado penalti en su contra. Cuando el balón vuelve al césped, el partido ya ha terminado. Desde entonces se establece que el partido se alargará, en caso de penalti, hasta la ejecución.

MEMORIAL DE AGRAVIOS AL VALENCIA CF.

Cada equipo guarda celosa y amargamente la lista de penaltis injustos que le han señalado en contra. En el caso del Valencia CF, uno de los más sonados se lo pitó el colegiado vasco Gojenuri. Era la temporada 1941-1942 y su puso el triunfo del At Aviación (actual At. Madrid) (0-1). Al final, el Valencia CF ganó la Liga, pese al apoyo recibido por el equipo del régimen. A raíz de aquel penalti, durante años, Mestalla coreaba "¡Go-je-nu-ri-Go-je-nu-ri!", cuando quería insultar a un árbitr